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Cárabo común: una belleza nocturna

Cárabo común: una belleza nocturna

Introducción

La observación nocturna es una actividad fascinante que nos permite descubrir maravillas en el cielo estrellado. Pero muchas veces, también podemos ser sorprendidos por las criaturas que habitan la oscuridad. Entre ellas, destaca el cárabo común, un ave rapaz nocturna que habita en bosques y zonas montañosas de Europa y Asia. En este artículo, descubriremos los secretos de esta belleza nocturna y aprenderemos sobre su hábitat y características.

Características generales

El cárabo común, también conocido como búho real o simplemente cárabo, es una de las rapaces más grandes que habita en Europa. Su tamaño es de unos 60 cm de largo y su envergadura puede alcanzar los 130 cm. Su peso oscila entre 1,2 kg y 2,3 kg y su plumaje es de color marrón grisáceo, con manchas blancas y negras en la parte inferior del cuerpo. Tiene una cabeza grande y redondeada con dos grandes ojos negros y una serie de plumas en forma de disco alrededor del rostro que ayudan a enfocar el sonido y a detectar la posición de sus presas.

Es una especie nocturna que se alimenta principalmente de pequeños mamíferos como ratones, topos y conejos, aunque también puede cazar aves, reptiles e insectos. Su vuelo es silencioso y elegante, gracias a las plumas suaves y especiales que tiene en sus alas y cola para amortiguar el ruido. Además, sus garras son muy potentes, lo que le permite cazar presas hasta tres veces su tamaño.

Hábitat y distribución

El cárabo común es muy común en Europa y Asia, donde habita en bosques ricos en árboles y vegetación densa. También se pueden encontrar en zonas montañosas y en tierras bajas, siempre y cuando exista suficiente cobertura vegetal y sitios rocosos donde puedan anidar. De hecho, esta rapaz puede adaptarse a entornos muy diversos y se ha visto en ciudades y aldeas.

En cuanto a su distribución geográfica, el cárabo común se encuentra en gran parte de Europa, desde España hasta Ucrania, y también en algunas zonas de Asia, como China y Japón. En España, es una especie muy común que habita en todo el territorio, desde los Pirineos hasta Andalucía.

Comportamiento y reproducción

El cárabo común es una especie muy territorial que defiende su territorio con ferocidad de otras rapaces y aves de presa. Sus hábitos son principalmente nocturnos, aunque también puede cazar durante el día si lo necesitan. Su época de reproducción es en invierno, entre diciembre y febrero, y anida en huecos de árboles, en rocas y en algunos edificios abandonados. La hembra pone entre 2 y 7 huevos y la incubación dura entre 28 y 33 días. Los pollos nacen con un plumón gris oscuro y son alimentados por ambos progenitores. Después de unas semanas, empiezan a volar y a cazar por sí solos.

Curiosidades sobre el cárabo común

  • Los antiguos romanos creían que los cárabos eran criaturas místicas capaces de prever el futuro y lo consideraban un augurio de buena suerte.
  • El cárabo es el símbolo oficial de la ciudad de Turku, en Finlandia, y han llegado a criar en torres de iglesias de la ciudad.
  • Los cárabos tienen una gran capacidad auditiva gracias a su disco facial, que les permite oír sonidos de hasta 10 veces más lejos de lo que pueden oír los humanos.
  • En algunas culturas, como la japonesa y la alemana, el canto del cárabo se considera un presagio de muerte.

Manejo y conservación

El cárabo común es una especie protegida en muchos países debido a su papel importante en el control de las poblaciones de roedores y otros animales que pueden resultar plagas. Sin embargo, en algunas zonas de Europa su población ha disminuido debido a la pérdida de hábitat y a la deforestación. Por esta razón, es importante preservar los bosques y los ecosistemas naturales donde habita el cárabo, así como fomentar la conciencia sobre la importancia de la biodiversidad y la conservación de especies.

Conclusiones

El cárabo común es una maravilla de la naturaleza que ha fascinado a los humanos desde tiempos antiguos. En la actualidad, sigue siendo un animal emblemático que contribuye al balance ecológico de los bosques y las zonas montañosas de Europa y Asia. Si tienes la oportunidad de observar esta belleza nocturna, no lo dudes: es un espectáculo que no te dejará indiferente.